Miqueas 6:6-8
“¿Con que me presentare ante Jehová, y adorare al Dios Altísimo? ¿Me presentare ante el con holocaustos, con becerros de un año? ¿Se agradará Jehová de millares de carneros, o diez mil arroyos de aceite? ¿Daré mi primogénito por mi rebelión, el futuro de mis entrañas por el pecado de mi alma? Oh hombre, él te ha declarado lo que es bueno, y que pide Jehová de ti: solamente hacer justicia, y amar misericordia, y humillarte ante tu Dios”
Hace unas semanas, el cuerpo pastoral y yo, tuvimos la gracia de asistir a una conferencia, en la cual el versículo ocho fue el ancla de la conferencia. Fué discutido como el panorama del día de hoy, que la idea de la justicia ha sido distorsionada por el mundo. Esto trae la pregunta a nosotros los creyentes ¿Cómo podemos ser hacedores de Justicia? En especial en nuestro entorno, donde hoy en día ha distorsionado el tema de la justicia social.
Pareciera que con el tiempo construir la idea de que seguir a Dios es hacer sacrificios o, simplemente mantenernos ocupados en su obra; más Dios nos ha enseñado lo que es bueno y demanda tres cosas: hacer justicia, amar misericordia y humillarnos ante nuestro Dios.
Como seguidores de Jesús, tal vez sea un poco difícil pelear por la justicia de algún grupo marginado, en especial un grupo del cual no estemos de acuerdo, ya sean por su posición política o social. Mas los creyentes debemos hacer justicia incluso cuando no sea popular ayudar a los que sufren injusticia, porque bienaventurados son los que padecen persecución por causa de la justicia, porque de ellos es el reino de los cielos. (Mat 5:10)
Amar la misericordia, porque Dios nos ha dado misericordia y de igual manera tenemos que amar y tener misericordia con las personas, porque los que son misericordiosos alcanzaran misericordia. (Mat 5:7)
Humillarnos ante Dios, tal vez este sea el más difícil de los tres, ya que en muchas de las ocasiones nuestro ego no nos permite reconocer que necesitamos humillarnos ante Él. Más si nos presentamos delante de Dios con un corazón limpio, podemos humillarnos delante de Él en adoración, y así podremos ver a Dios.
En nuestro mundo el día de hoy, todos los grupos pelean por la justicia social de algún grupo, que, por lo general, esto es a cuesta de otro grupo. Más los creyentes debemos pelear por la verdadera justicia que solo Dios puede dar, no como el mundo la da, ya que, a lo largo de la historia, cuando un grupo marginado toma el poder, ellos se convierten en los abusadores del grupo que los marginaba. Más Cristo ha traído verdadera justicia, de la cual nos ha dado igualdad en su reino por medio de su sacrificio en la cruz. Así que, como seguidores de Jesús, podemos contestar la pregunta de inicio al hacer lo siguiente, cuando amamos la justicia, hacemos misericordia, y nos humillamos ante nuestro Dios, entonces podemos ser un hacedor de justicia.
Pastor Luis is the Spanish pastor at FBC Weslaco, and the goal is that his devotional will be in Spanish once a month.